Seguramente ya habéis escuchado muchas veces hablar de la educación en positivo, o, sobre cómo a través de este modelo de crianza podéis desarrollar la inteligencia emocional de vuestros hijos. Pero, ¿sabéis cómo aplicarla con pequeñas y sencillas acciones en la rutina diaria?
A continuación os contamos una serie de hábitos, categorizados por edad, que os ayudarán a aplicar la educación en positivo, sentiros más satisfechos como padres y disfrutar más de vuestro rol durante la etapa infantil.
De 0 a 12 meses
- Habla con tu bebé. Aunque no te entienda, tu voz le da calma y seguridad.
- Responde a sus balbuceos y sonidos, repitiendo sonidos o agregando palabras.
- Léele, cántale, ponle música.
- Elogiale y dale mucho amor.
- Cógelo en brazos, abrázalo, hazlo sentir seguro y querido.
- Juega con tu bebé cuando esté alerta y relajado. Déjalo descansar si muestra señales de cansancio o molestia.
- Cuando comience a moverse y a tocar objetos, permítele explorar en entornos seguros, eso desarrollará su confianza y autonomía.
De 1 a 2 años
- Léele todos los días.
- Invítale a jugar clasificando figuras o a armar puzzles, también, a buscar objetos o a señalar partes del cuerpo.
- Completa las palabras que comienza a decir.
- Déjale comer por sí solo o vestirse.
- Anímalo a explorar objetos, lugares, comidas o actividades nuevas.
- Reacciona más ante los comportamientos positivos, que ante las rabietas.
- Explícale lo que debería haber hecho ante un mal comportamiento.
- Planifica paseos por el parque, en coche o en el autobús, sin dispositivos electrónicos, para fomentar en el niño la curiosidad por lo que le rodea.
De 2 a 3 años
- Reserva una hora especial para leer un libro.
- Anímalo a participar en juegos de simulación o a seguir al líder.
- Llévale a andar, a montar bici o un cochecito para que explore el ambiente.
- Enséñale canciones sencillas tradicionales. ¡Cantéis juntos!
- Presta toda tu atención cuando el niño quiera decir o contar algo.
- Festeja cuando siga instrucciones o tenga un comportamiento positivo.
- Limita la atención cuando se ponga desafiante o haga rabietas.
- Enséñale formas aceptables de manifestar su enojo.
De 3 a 5 años
- Llévalo a bibliotecas y librerías para inculcarle el amor por los libros.
- Permítele que ayude con tareas sencillas.
- Anímalo a que juegue con otros niños. Esto lo ayudará a entender el valor de compartir y de la amistad.
- Sé claro y no cambies las reglas.
- Cambia los “no” por una explicación sobre lo que sí debe hacer.
- Explícale cuál es el comportamiento que espera de él.
- Háblale con oraciones completas y palabras de adultos. Enséñale a construir frases correctamente.
- Dale opciones sencillas para que pueda tomar pequeñas decisiones, tales como, qué ponerse, a qué jugar o qué merendar.
Animaos desde hoy mismo a poner en práctica la educación en positivo, ¡es muy fácil!