Normas y límites desde pequeños.

  • ¿Por qué nuestros hijos los necesitan?
  • Aplicar límites a los niños sin acabar siendo el ogro del cuento.

En la última escuela para padres de Xicotets con nuestra psicopedagoga Encar Casas, hemos estado aprendiendo un poco más sobre la importancia de poner límites desde pequeños y por qué las normas les ayudan en su crecimiento y maduración personal: son necesarios para el desarrollo de las habilidades sociales, su autonomía y la capacidad de esfuerzo, responsabilidad y autodisciplina entre otras aptitudes emocionales.

Si no queremos adolescentes insatisfechos y algo tiranos, lo mejor es ayudarles a cumplir ciertas normas y tareas desde bien pequeños. Los límites y las normas deben adaptarse a la edad y a las capacidades de cada niño.

Como sabemos que a veces resulta difícil para los padres establecerlos sin sentirnos como los malos de la peli, os damos 3 claves para ayudar a vuestros hijos:

1. Firmeza. Lo más probable es que en ciertos momentos no esté dispuesto a cumplir la norma, ya que la tendencia es a hacer lo que en cada momento apetezca, por lo tanto, habrán llantos, pataletas o rabietas. Ante esto, mostrad seguridad. Si el niño percibe que esa norma no es importante como para cumplirla, el mensaje que recibe es que ninguna otra lo será. Tenemos que ser coherentes y consecuentes con lo que hayamos dicho.

2. Normas concretas: Según la edad, tienen la capacidad para entender las ordenes que reciben. No sirve de mucho decirle: ayuda en casa. Debemos ser concisos con mensajes del tipo: guarda tu babero en el cajón o deja el libro en su sitio. Tampoco entenderán algo tan abstracto como ‘sé generoso’ sino más bien: jugad juntos con los coches, pásale la pelota, etc.

3. En positivo. Normalmente, a las personas nos cuesta menos obedecer cuando recibimos un mensaje en afirmativo. Hay situaciones en las que nos alteramos y es difícil mantener la calma para hablarles en positivo, pero veréis que si cambiamos el ‘NO desordenes tu habitación’ por ‘Vamos a recoger juntos tus juguetes’, el peque lo acepta con mucha más naturalidad y os ahorráis una discusión.

Aunque muchas veces nos resulta más fácil suplir nosotros su tarea que hacerle obedecer, pensad que la rutina les ayuda a madurar y a sentirse valorado como miembro de la familia, ¡como un mayor!

¿Recitar poesía a mi bebé?

Una de las mayores pasiones de un bebé es compartir un rato a solas con mami, en un ambiente tranquilo, escuchando la dulzura de su voz.

Por eso hoy os proponemos una actividad que os va a encantar, no sólo por lo bien que lo pasaréis juntos, sino por los beneficios que conlleva para tu peque: recitarle poemas infantiles.

Son tantas las ventajas de la poesía infantil que sería muy extenso comentarlas todas. Hoy destacamos 7 beneficios que conlleva para tu bebé y para ti:

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Si no tienes ningún libro de poesías infantiles, siempre puedes recurrir a alguno de Gloria Fuertes. También te recomendamos alguno de los siguientes:

Jessica Rodríguez, Tutora aula Océano Azul  1/2 años (Xicotets Vlc)

Irene Pablo, aula Granja Naranja   1/2 años (Xicotets Vlc)

¡Volvemos a la rutina!

Esta semana volvemos a la normalidad después de las vacaciones navideñas.

Entre los 2 y 3 años, nuestros peques ya tienen las rutinas asentadas y puede que tras estos días de descontrol, les cueste un poco retomarlas. Nos hemos acostado y levantado más tarde, comidas a distintas horas… en definitiva, ¡hemos disfrutado las vacaciones! Ahora toca ayudarles a recuperar los horarios, os dejamos algunos trucos que os pueden servir.

– Hazle partícipe del nuevo plan: explícale que nos vamos a ir antes a la cama para estar con mucha energía para el cole.

– Intenta hacerlo igual que antes de vacaciones: en realidad no es una rutina nueva, solo tiene que recordarla y ‘reacostumbrarse’. Para ello, sigue las mismas pautas que solíais hacer: bañarse, lavarse los dientes, un cuento…

– Recuperad los hábitos de alimentación saludables: reservad tiempo para desayunar bien, dejemos un poco de lado los dulces, bollería, etc.

– Mantener una actitud positiva: si el niño detecta que te supone un agobio volver a la rutina, él lo asumirá como algo negativo. Resaltadle los aspectos positivos de la vuelta: ver a los amiguitos, ver a su seño, volver a su clase, con sus juguetes, el patio…

– Preparad juntos la vuelta a su cole: la mochila, el babero, el juguete que le han traído los Reyes Magos… haz que sea un proceso emocionante en vez de estresante.