Cuando los peques cumplen 1 año, dejan atrás la etapa en la que los juguetes sirven únicamente para mirar, escuchar y tocar. Ahora comienzan a descubrir el movimiento, a arrastrarse y en algunos casos a andar. Por ello, para ayudarles a trabajar su psicomotricidad, os contamos 5 formas de juego que les ayudarán a desarrollar sus aptitudes y habilidades en esta fase.
– Pelotas: Con las más grandes (tipo pilates) podrán empujarse y correr tras ellas. Las de tamaño más pequeño le encantarán para poderlas pasar y lanzar. Se pueden combinar distintos colores y texturas para que experimenten.
– Puzzles adaptados: Con pocas piezas, de tamaño muy grade y con dibujos sencillos son ideales para la edad de 1-2 años.
– Encajables: Son un clásico que les ayuda a familiarizarse con las formas geométricas, a hacer pinza con las manos y a mejorar la concentración al intentar colocar una pieza dentro de otra.
– Juegos de movimiento: son adecuados para el desarrollo psicomotor: correpasillos, triciclos, balancín…
– Juguetes de expresión artística: es un buen momento para comenzar a estimular la parte artística del bebé y que comience a descubrir nuevas formas de comunicación: pizarras, juegos musicales, pianos adaptados a su edad, pinturas grandes…
Además de ayudarlos en su desarrollo motriz y sensorial, es una buena forma de compartir en casa momentos de intimidad y diversión con ellos. Están en una etapa fantástica en la que comienzan a descubrir el mundo por sí mismos. ¡Aprovechadla juntos y a disfrutar en familia!
